sábado, 11 de mayo de 2013

Todos los días de mi vida.

Borrador.Parte 19.

Al final del camino todos los días de mi vida sólo serán una cifra, como mis años, los aniversarios o las vidas que pueda tener o no un gato. Al final del camino puede que me pregunte dónde está  el resto del tiempo que no viví contigo, los que en mi alma suman una eternidad y en tu cuenta sólo cuatro. Al final del camino puede que no sea crucial nada de lo que me quede por hacer y por eso la sabiduría de los años haga más densos mis huesos, más nítidos mis recuerdos, más elocuente mis silencios y más dulce mi pasado, en la misma manera que hace más perecedera mi voluntad y criterio de haberte amado... 

Y a excepción de algunas personas y tus besos, casi todo lo que considero importante, puede que en algún momento deje de serlo sin que pueda remediarlo. Porque algunas cosas caen por su propio peso y otras simplemente mueren con los años. Por eso nunca digo mi edad a quien me parece ajeno o extraño, porque para quien no me conoce todos los días de mi vida sólo serán una cifra, que para su creer bien podría ser de lo que me quede o de lo dado...

Y puede que muera joven  o a lo mejor con cien años y puede que todo lo que te ame muera conmigo. Puede que todo lo que te ame quepa en un libro o en un párrafo. Pero nunca serás una cifra, ni primera ni última. Serás la única y sin importar cuantas vidas me tome, en todas te habré esperado...
LPF.01F85