Puede que el día más importante de tu vida todo marche según lo planeado y sea perfecto por eso. Puede que simplemente comience una tarde cualquiera o de madrugada, sin más lujo que la Sangue Di Giuda y Veinte centímetros sobre el suelo.
Sin embargo el
día más importante de tu vida será el día que incondicionalmente te
entregues a algo. Esos serán los mejores días de tu vida, los
irreemplazables, los irrepetibles y puede que durante su transcurso tus
planes se derrumben o te rompan el corazón, puede que simplemente no tengas
una sonrisa para el final del día y duela sin que haya nada que puedas hacer
al respecto, sin un plan mejor. Pero aún así seguirá siendo el día
más importante de tu vida y no habrá de desaparecer solo porque para quien no lo
fue lo desee.
Probablemente el
día más importante de tu vida no sepas que lo has vivido hasta mucho
tiempo después. Porque el día más importante de tu vida, casi nunca es como
imaginas y sucede cuando tiene, no cuando quieres, ni creas que deba ser.
El día más importante de tú vida para quien no lo fue habrá sido solo un
momento, sin embargo para ti tendrá la irrevocable sensación de haber sido
perfecto y habrá de quedar tatuado en tu corazón y esculpidos en tus
pensamientos, para que perdure por siempre. Y ha de llegar como un soplo de
aire fresco, en silencio y evocando algún recuerdo...
La vida no es lo que uno vivió, sino lo que uno recuerda.
Gabriel García Marquez.