La maternidad es una bendición, aunque a veces no llegue en el momento más oportuno. Una vez que tienes ese manojo de vida entre tus manos te das cuenta que te ha pillado para siempre y que todo lo que hagas a partir de ese momento tendrá la consecuente segunda intención de salvaguardar y preservar su bienestar.
El acto de la maternidad es una bendición, pero el matrimonio no. El matrimonio es una institución social que crea un vinculo conyugal entre sus miembros. Antes entre personas de diferente sexo y ahora también entre personas del mismo sexo, en un futuro no muy lejano te podrás casar con tu mascota (un mono, un perro, una cabra) yo creo que si no lo han autorizado es porque la gente sería capaz de decir que su mascota trabaja, con el único fin de cobrar sus prestaciones. Sí, porque de hecho hay animales que trabajan en el circo, en el campo y no cobran por ello. Pero bueno este no es el tema y no vamos a dar ideas.
El tema es que cuando este lazo matrimonial se rompe y hay hijos de por medio, en una mayoría de casos quien sale mayormente perjudicada es la mujer. Una buena parte de hombres reconoce que una mujer con hijos de otros matrimonios no es la persona ideal con la que desean tener una relación formal o conyugal. Sin embargo para tener sexo esto no representa un impedimento es solo información útil a tener en cuenta, y en la mayoría de casos salimos huyendo como si tuvieran la peste. Y aunque desafortunadamente esto suene machista, estúpido y egoísta no deja de ser una realidad. Esto no sucede porque los hombres sean seres desalmados, sino porque una mayoría prefiere evadir la responsabilidad.
Por eso una madre soltera o divorciada tiene una labor doblemente difícil. La primera educar a su hijo practicamente sola, porque un fin de semana cada 15 días un padre no educa a nadie. La segunda sobrevivir con un sueldo en ocasiones de mierda que a penas le da para llegar a fin de mes. La vida ya es muy dura para una mujer casada y con hijos, separada y con hijos imagino que lo sea el doble, será cuestión de elegir bien para cada una de ellas lo que marque la diferencia, aunque como he dicho siempre en la vida todo es cuestión de suerte. Ojo tampoco digo que sean unas santas, ni que todo lo que hagan esté justificado por las desventajas antes mencionadas. En la venia del señor tiene que haber de todo. Y a veces los hombres también somos víctimas, aunque sean las muy menos.
Mis comentarios no parten de una base machista espero que nadie se sienta ofendido o menospreciado al respecto.
